jueves, 30 de enero de 2014

La crueldad del fútbol

Excelente partido de la SD Ourol ante uno de los máximos favoritos al ascenso de categoría.

Los nuestros jugaron sin complejos hasta el final. Literalmente. Porque el gol de Isaac que decidió el choque llegó en el minuto 89. 

Dos estilos frente a frente. Optaron los locales por un juego más combinativo. Los de Pereira por el juego directo, explotando la carta de Seijo y la velocidad de Ambi por banda izquierda.

La primera ocasión clara fue para los nuestros. Balón al espacio, entre el central y lateral que Feli estrelló contra Roberto que salió a la desesperada para achicar. 
Sin lugar a dudas protagonizamos la mejor primera parte de la temporada. Con intensidad, llegando, finalizando y poniendo en muchos problemas a una de las zagas más seguras del campeonato. El premio a esa constancia llegó a través de un penalti. Brazo extendido, el impacto es claro cortando la trayectoria de un balón centrado desde la banda derecha. 

Kivito transformó con tranquilidad a la derecha de Roberto. Inmediatamente después se llegó al descanso. La hinchada local tremendamente satisfecha.

El potencial físico visitante se impuso en la segunda mitad. Los del Municipal subieron una marcha desde el inicio de la segunda mitad consciente de que en campos como O Coto puede estar el ascenso que se escapó el año pasado en A Cha. Y cuando decimos que subieron una marcha nos referimos a todo. En agresividad. En el más amplio sentido de la palabra. Excesos inclusive. Desde aquí consideramos que hay entradas que no caben en un campo de fútbol. Sea el autor que sea. Solo con ver el apartado LESIONES del acta del partido nos aparecen cuatro jugadores de los nuestros, alguno de los cuales estará un tiempo alejado de los terrenos de juego. 

Dos defendimos bien. Achicando espacios e incomodando la circulación del conjunto, en esta ocasión, blanco. Pero el gol del empate llegó todavía con tiempo para que los de Pereira se llevaran la victoria. Y llegó a través de Isaac. Probablemente el gol más bonito que vaya a meter en un campo de fútbol. Prácticamente idéntico al de Goikoetxea en el Mundial de Estados Unidos 1994 contra Alemania pero prácticamente en la escuadra. ¿Centro? ¿Chut? Se nos antoja más bien centro. 

Celebraron los visitantes la el gol y la victoria de forma efusiva. Síntoma del gran partido que se marcaron nuestros jugadores.

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